En esta receta vamos a preparar una Tarta de Queso Japonesa, también conocida como Japanese Cotton Cheesecake. Con una textura suave y un sabor delicioso. Seguro se convertirá en vuestra tarta favorita!
Ingredientes:
- 300 gr. de queso crema
- 60 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 100 ml. de leche entera
- 6 huevos
- 1 cucharada de zumo de limón
- 140 gr. de azúcar
- 60 gr. de harina de trigo
- 20 gr. de harina de maíz (Maizena)
- una pizca de sal
Preparación:
Precalentamos el horno a 180º.
Empezamos preparando un molde de 20 cm. de diámetro. Para ello, rociamos con mantequilla todo el interior del molde y forramos el fondo y los laterales con papel vegetal. Si el molde que vamos a utilizar es desmoldable, como en este caso, lo forraremos también con dos capas de papel de aluminio para que quede bien hermético.
A continuación, separamos las claras de las yemas y reservamos.
En un bol grande derretimos (al baño maría) el queso en crema, la mantequilla y la leche. Y lo removemos hasta que se nos quede una crema sin grumos.
Lo apartamos del fuego y le añadimos las yemas poco a poco, mientra batimos hasta que se integren por completo.
Vertemos el zumo de limón
y cuando lo tengamos bien mezclado, añadimos la harina, la maizena y la sal, tamizadas.
Lo batimos todo hasta conseguir una crema homogénea y reservamos.
Después, batimos las claras a velocidad media
y cuando empiecen a blanquear, añadimos el azúcar poco a poco y batimos hasta que el merengue forme picos suaves.
Una vez listo, lo vamos incorporando, poco a poco, a la crema que teníamos reservada.
Lo haremos con movimientos envolventes (para que el merengue no pierda aire).
Cuando lo tengamos todo bien integrado, vertemos la mezcla en el molde.
Lo colocamos en el centro de otro más grande y lo llenamos con agua caliente hasta cubrir un tercio del molde más pequeño (para hornear la tarta al baño maría).
Y al horno!
La hornearemos a 180º durante 20 minutos. Transcurrido ese tiempo, bajamos la temperatura a 140º y la horneamos 30 minutos más.
Pasados los 30 minutos, apagamos el horno y la dejamos en el interior otros 15-20 minutos más, con la puerta entreabierta para que vaya enfriándose lentamente.
La sacamos del horno, le quitamos el papel de aluminio y la dejamos que se enfríe por completo sobre una rejilla. Cuando la tengamos fría, la guardamos en el frigo un mínimo de 4 horas antes de desmoldarla.
Y ya la tendremos lista para disfrutarla!
Espero que os guste! ♥
