En esta receta vamos a preparar unos Mini Bundt Cakes de Limón. Son unos bizcochitos muy tiernos y jugosos. Para la decoración, prepararemos una glasa con un toque de limón que dará un toque especial al bizcocho. Para que se mantengan por más tiempo esponjosos, los podemos pincelar con un poco de almíbar (ésto es opcional). Con estos ingredientes pueden salir 6 mini bundts.
Ingredientes para el bizcocho:
- 250 gr. de harina
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- una pizca de sal
- 3 huevos L
- 250 gr. de azúcar
- 150 ml. de aceite suave de oliva o de girasol
- 150 ml. de buttermilk (encaso de que no la encontréis, más abajo os explico cómo prepararla)
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- la ralladura de 2 limones medianos
- el zumo de 2 limones medianos
Preparación del bizcocho:
Precalentamos el horno a 180º y preparamos los moldes rociándolos con mantequilla.
En un bol tamizamos la harina, la levadura, el bicarbonato y la pizca de sal. Mezclamos y reservamos.
Ahora, preparamos la buttermilk. Para ello, añadiremos una cucharada de zumo de limón a la leche y lo dejaremos reposar durante 10 minutos (no os preocupéis si transcurrido ese tiempo veis la leche con grumitos, es normal).
Batimos los huevos con el azúcar hasta que tripliquen su volumen.
A continuación (y sin parar de batir) añadimos el aceite,
y 3 cucharadas de zumo de limón.
Seguimos añadiendo, poco a poco, la harina y la buttermilk. Este paso lo haremos a la velocidad más baja que tenga nuestra batidora y sólo lo necesario para que la harina se integre.
Como los moldes son muy pequeños, podemos pasar la masa a una jarra y de esta forma resultara más fácil repartírla.
Los hornearemos durante 20-25 minutos (dependiendo del tipo de horno) o hasta comprobar, pinchando con un palito en el cetro del bizcocho, que éste sale limpio. Cuando estén, las sacamos del horno y los dejamos enfriar 15 minutos antes de desmoldarlos. Durante este tiempo, podemos pintarlos con el almíbar (ésta parte es opcional). Para ello, calentamos 30 ml. de agua, 60 gr. azúcar y 30 ml. de zumo de limón, hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Pasado ese tiempo, los desmoldamos y los dejamos enfriar sobre una rejilla.
Cuando estén fríos preparamos el glaseado, ya que lo mejor es usarlo recién preparado.
Ingredientes para el glaseado:
- 200 gr. de azúcar glas tamizado
- 2 cucharadas de zumo de limón
- un chorrito de nata líquida
Preparación del glaseado:
En un bol, mezclamos el azúcar glas con las 2 cucharadas de zumo de limón y vamos añadiendo la nata líquida, poco a poco, hasta conseguir la textura de yogur.
Y ya podemos decorar nuestros bundts!